Seguro que, más de una vez, has escuchado hablar acerca del popper. Es más, es posible que incluso lo hayas utilizado en alguna ocasión y te preocupen todos esos mitos que circulan en torno a él. Por este motivo, en estas líneas, queremos aprovechar para contarte lo que es cierto y lo que no para que lo tengas todo mucho más claro y decidas si te apetece usarlo o no.

¿Qué es exactamente el popper?


Lo primero que debemos hacer, como es evidente, es definir exactamente qué es el popper. En concreto, se trata de un líquido incoloro con un fuerte olor característico compuesto, fundamentalmente, por nitrito de amilo, nitrito de isobutilo y nitrito de butilo. Su ingesta directa puede llegar a ser extremadamente dañina para el organismo humano, por lo que hay que tener cuidado. Sin embargo, el método de uso de esta sustancia consiste en, simplemente, inhalar sus vapores.

Los efectos del popper son visibles de inmediato y tienen una duración que oscila entre uno y dos minutos. En este sentido, durante el transcurso de ese tiempo, el ritmo cardíaco asciende y se relaja la musculatura de diversas zonas del cuerpo como, por ejemplo, el ano y la vagina en el caso de las mujeres. Este es el motivo principal por el que algunas personas lo toman con el propósito de tener relaciones sexuales más placenteras.


¿Qué mitos sobre el popper son verdaderos?

Por el motivo que acabamos de comentar anteriormente, el popper tiene una influencia sobre la práctica de las relaciones sexuales. Sin embargo, sus efectos son tan cortos en el tiempo que no tiene por qué relacionarse directamente. Asimismo, muchas personas consideran que es una droga, pero lo cierto es que ni siquiera las autoridades sanitarias se atreven a confirmarlo. Este es el principal motivo por el que su venta es totalmente legal.

Por su parte, algunos estudios han revelado, supuestamente, que el consumo prolongado de popper puede conducir a sufrir determinados efectos adversos. De hecho, afirman que se podrían derivar daños neurológicos y alteraciones temporales de la visión, así como vértigos, vómitos y convulsiones. Sin embargo, lo cierto es que, para alcanzar esta sintomatología, haría falta consumir una cantidad prácticamente imposible de vapores de la sustancia. Lo que sí es más habitual es sufrir dolor de cabeza con posterioridad.

También hay que señalar que el popper es menos perjudicial para la salud que la inmensa mayoría de drogas recreativas existentes. De hecho, es menos nocivo que el tabaco y el alcohol. Además, no produce dependencia, como sí suceden con estas. En cambio, en aquellos casos en los que se utiliza en exclusiva para mantener relaciones sexuales, es posible desarrollar ciertas disfunciones sexuales si no se toma. Sin embargo, en la mayoría de los casos, esta se debe a un efecto psicológico, no físico, que tampoco puede tildarse como habitual.





Advertencias: este artículo solo incluye contenido informativo. Le sugerimos que siga las instrucciones dadas en lo rotulo de cada botella. Popper liquido no debe utilizarse para ningún otro fin que no sea el previsto. No somos responsables de su mal uso.